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El proceso de exportación de frutas y hortalizas frescas comienza con la recolección de las mismas. Este proceso juega un rol clave en el éxito de la venta, por ello debe planearse con anticipación, de tal forma que los productos conserven sus características organolépticas. Para esta planeación deben contemplarse aspectos tales como:
- Índices de cosecha: tamaño, forma, color, edad del fruto, contenidos de azúcares, almidones, aceites, etc.
- Herramientas y empaques adecuados para la recolección (recipientes, vasijas, canastillas, etc.)
- Hora de recolección: las mejores condiciones fisiológicas de las frutas y hortalizas se presentan en las primeras horas del día; se debe evitar su recolección bajo temperaturas extremas.
- Condiciones de almacenamiento temporal: una vez cosechado el producto debe protegerse de lluvias, vientos y sol y mantenerse en condiciones de conservación a una temperatura inferior a 12° C.
- Equipo de transporte: la movilización de las frutas y hortalizas desde la zona de cosecha hasta la planta de acondicionamiento, empaque y acopio o maquila, debe realizarse en el menor tiempo posible.
El siguiente proceso es el de acondicionamiento y empaque en planta o maquila, según sea el caso.
La planta de acondicionamiento y empaque debe contar con un área suficiente y técnicamente distribuida que disponga de la infraestructura necesaria para:
- Recepción del producto (descargue, pesaje, inspección y preselección).
- Acondicionamiento (lavado, desinfección, selección, etc.).
- Tratamientos (inmersión en agua caliente, encerado, irradiación, secado, etc.).
- Clasificación (manual o mecánica).
- Empaque y paletizado.
- Enfriamiento y almacenamiento.
La etapa de enfriamiento juega un papel muy importante en el manejo de productos frescos, para mantener su calidad y prolongar su vida útil. Para ello, es necesario realizar el enfriado de manera rápida y almacenar en condiciones de temperatura y humedad relativa específicas para cada producto.
Se debe tener en cuenta que, durante el desplazamiento hasta el destinatario final, la fruta u hortaliza debe permanecer en las mismas condiciones iniciales de almacenamiento, y que, por tanto, en el transporte al puerto de embarque, en las bodegas del agente de carga y en el transporte principal para la exportación, se debe mantener la misma temperatura y humedad relativa, dentro del contenedor o las bodegas intermedias.
Una vez acondiciona y unitarizada la carga, el siguiente proceso es el transporte de la carga desde la planta al puerto de embarque, y su manejo dentro de este.
El transporte debe realizarse, en lo posible, en camión o contenedor refrigerado, estimándose el tiempo de tránsito de tal forma que el producto llegue al destino final en el punto óptimo para el consumidor.
Es importante obtener, con anticipación al embarque, las reservas de espacio para el transporte; para este proceso se requiere tener disponible la siguiente información:
- Nombre del exportador,
- Nombre del consignatario,
- Nombre comercial y técnico del producto a transportar y clasificación arancelaria del mismo,
- Unidad comercial o de empaque,
- Características de manejo,
- Tipo de empaque,
- Pesos y volúmenes,
- Lugar de origen,
- Puerto de embarque,
- Puerto de desembarque,
- Pago de fletes, y
- Agente o representante.
Es conveniente tener en cuenta que los equipos de transporte terrestre refrigerado y los contenedores no están diseñados para disminuir la temperatura del producto, sino para mantenerla, por lo que es necesario pre-enfriar el producto a la temperatura recomendada para su mantenimiento durante el almacenamiento y transporte. La forma de estibar el producto en el vehículo de transporte depende del empaque, producto, tipo y tamaño del vehículo, pero siempre debe planificarse y manejarse cuidadosamente para minimizar el daño, tanto físico como de origen ambiental.
Por último, en lo que se refiere al manejo de la carga en el puerto de embarque se debe tener con anticipación aspectos tales como:
- Coordinar la entrega en los puntos de embarque y desembarque.
- Establecer requerimientos aduaneros y fitosanitarios.
- Definir condiciones de aforo de la mercancía.
- Determinar necesidades de bodegaje en frío.
- Establecer manejo y transporte para la entrega al importador o distribuidor.
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